La serie bestseller número uno que comenzó con A la caza de Jack el Destripador y A la caza del príncipe Drácula continua con esta tercera entrega sangrienta…
Audrey Rose y Thomas Cresswell se encuentran a bordo de un lujoso transatlántico que se convierte en una horrorosa prisión flotante cuando un asesino termina con la vida de los pasajeros uno por uno… y no hay lugar adonde escapar.
Al emprender un viaje de una semana por el océano Atlántico a bordo del opulento RMS Etruria, Audrey Rose Wadsworth y su compañero de investigaciones, Thomas Cresswell, se ven deslumbrados por una compañía itinerante de artistas de circo, videntes y un carismático joven escapista que entretienen por las noches a los pasajeros de la primera clase.
Pero algunas jóvenes de alta cuna comienzan a desaparecer sin ninguna explicación y una serie de asesinatos brutales conmociona al barco entero. La inquietante y extraña influencia del Carnaval Luz de Luna invade las cubiertas a medida que los asesinatos se vuelven más y más perturbadores. Audrey Rose y Thomas deberán resolver estos casos espeluznantes para evitar que más pasajeros mueran antes de llegar a destino. Pero cuando las pistas indican que la próxima víctima quizás sea alguien a quien ella ama, ¿podrá Audrey Rose desentrañar el misterio antes de que el asesino lleve a cabo su macabro acto final?
Buenos días:
Hoy vengo con la tercera y el libro que menos me ha gustado de toda la saga. ¿Lo he leído bien como el resto? Sí. El libro me ha enganchado y lo he leído de una sentada, pero eso no significa que a ratos (muuuuchos ratos) no me apeteciera tirar el libro o ahostiar a Audrey Rose.
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| ¿Qué haces, Audrey, qué haces? ¿Te han sentado mal las olas del barco, criatura? |
Ese es el principal problema que le veo. Si lees los dos libros anteriores, ya conoces el carácter de muchos personajes, sobre todo Audrey Rose y Thomas. El mar y estar encerrada en un barco durante días le ha debido sentar muy mal a Audrey porque no parece ni la misma persona que en los dos libros anteriores. Por una parte me ha parecido muy hipócrita, porque juega con el futuro de su prima a sus espaldas cuando ella siempre se la ha caracterizado por defender la libertad de decisión de las mujeres. Por otra parte me ha parecido muy atolondrada, realiza acciones que yo pensaba que rozaban la inconsciencia. Mira que ni a Thomas ni a Audrey se les caracteriza por ser paraditos, van hasta el final de las investigaciones a pesar de todos los riegos que corren, pero aquí a Audrey Rose se le ha ido la cabeza. En 'mostrar' hay spoilers.
Otro problema que veo bastante gordo es el innecesario triángulo amoroso que nos presentan. Audrey Rose comienza el libro súper enamorada de Thomas, bebe los vientos por él. Pues, en un par de horas, conoce al jefe del circo (Mephistopheles), hace un trato con él para investigar y empieza a dudar y a dar bandazos entre Thomas y Mephisto. Audrey tiene las hormonas revolucionadas, esta modo adolescente total. Al pobre Thomas no le da ni una explicación de lo que está haciendo con Mephisto tanto tiempo (supuestamente investigar). Las tramas de triángulos amorosos me dan una pereza enorme y creo que aquí ni era necesaria y además ha afectado a la investigación de los crímenes. La trama de las dudas de Audrey se ha comido a las de la investigación de los crímenes tan macabros que se encuentran. Las apariciones de Thomas son cada vez más reducidas y su papel lo toma Mephisto, que no lo llega ni a la punta de los zapatos en este tema. En este libro descubrí que Thomas era mi personaje favorito por lo que lo eché de menos.
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| Mi cara al descubrir que se avecinaba triángulo amoroso |
Que Thomas y Audrey se distancien tanto afecta a la trama investigación. Ya no vemos tantas entrevistas con los posibles sospechosos ni tanta búsqueda de pruebas por lo que llevaba más de la mitad de la novela y no tenía ni teorías propias de cuál podría ser la identidad del asesino. Eso es en el fondo lo que más he echado de menos: el equipo que forman Thomas y Audrey. La intuición que tiene ella con la capacidad de deducción de él. Reducir las intervenciones de Thomas y ampliar las de Mephisto son como tener una novela con Watson trabajando sin Sherlock. Por si fuera poco, tampoco he logrado muy bien entender las motivaciones de Mephisto para pasar tanto tiempo con Audrey porque por la investigación no es porque van perdidos de un lado a otro como un pulpo en un garaje, así me lo único que saco de aquí es que tenía un calentón y la muchacha le gustó.
Me parece muy admirable la paciencia de Thomas cuando ve que Audrey está pasando muchas noches con Mephisto y que él le tira los trastos sin disimulo delante de todos. Me ha faltado que la sentase a hablar con ella y le pidiera explicaciones. Aun encima, cuando la ve tan agobiada, le da su espacio para que ella se aclare. Me ha parecido de diez, yo la habría mandado al pijo en menos que canta un gallo. Me ha faltado más escenas con su perspectiva y no solo la de Audrey, en muchos momentos de la novela no sabes ni que siente. Después de esta novela, leí un relato (el 3.5.
Becoming the Dark Prince, lo van a publicar en 2021 en español) en el que vemos algunas escenas de este libro, sobre todo de la recta final, con su perspectiva que sinceramente las habría integrado a esta novela.
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Audrey se tenía que haber arrastrado a pedir disculpas a su prima y a Thomas
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Creo que no me dejo nada, califiqué esta novela con un 7,5/10 porque, aunque en mi opinión tiene estos problemas, la he leído del tirón y he estado enganchada. Creo esta novela mejoraría mucho si hubiéramos tenido escenas con la perspectiva de Thomas y no solo de Audrey o sinceramente si hubieran investigado esos crímenes tan llamativos sin ese triángulo amoroso tan innecesario de por medio.
¿Habéis leído esta novela? ¿Os gustó u os pasó como a mí? Y puesto que he mencionado una de las tramas que más pereza me dan (triángulos amorosos), ¿tenéis algún tipo de trama que no os guste o que os de sopor?
Besos
