Lecturas de julio

Hola:

Tengo esto un poco abandonado por el verano. Espero que vosotros también tengáis abandonados vuestros blogs por estas fechas y que sea por vacaciones y no por curro (como servidora). Como cada mes, vengo a hacer balance. En este caso de julio, un mes muy productivo puesto que leí 8 libros. Nada mal teniendo en cuenta la crisis lectora en la que estaba hace poco. 

Después de la cantidad, procedamos a la calidad, que en el fondo es lo más importante. 

El favorito del mes

Me ha costado elegir favorito este mes. Normalmente cada mes está entre 2 lecturas que destacan entre el resto, pero este mes hay 4 que me han gustado mucho. Al final he mirado en Goodreads para ver a cual la puntué mejor para decidirme. Y la ganadora ha sido The Kiss Quotient (publicada como La ecuación del amor en español) de Helen Hoang. Con este libro me ha pasado algo curioso porque en mayo me leí medio y lo tuve que dejar porque no lo estaba disfrutando nada, estaba negativa y cada vez que leía me venían a la mente comentarios del tipo "qué casualidad que escoja al escort y que se atraigan, que él sepa como tratar a personas con autismo". Esto me suele pasar bastante con las contemporáneas, pero no es plan leerlas así sin disfrutarlas. 

La empecé en julio y esta vez sí. Me he enamorado de la historia de Stella y Michael. Los personajes están muy bien construidos. Stella es una mujer éxitosa, con una mente brillante y que destaca en su empresa. Tiene autismo, así que le cuestan mucho las relaciones sentimentales y sexuales. Por lo tanto, contrata a un escort para que la ayude a aprender. Ese es Michael, que por circunstancias personales debe ejercer ese oficio. Para entendernos, es Pretty Woman, pero con los roles invertidos. He disfrutado mucho como va evolucionando la relación entre los protas, las escenas sexuales son muy hot (y que diga yo eso es raro) y el tema del autismo está bien tratado. 

Me han gustado

-Stalking Jack the Ripper de Kerri Maniscalco (Publicada en español como A la caza de Jack el Destripador). Le tenía ganas desde hace tiempo a esta novela y he tenido la oportunidad de leerla con mis compañeras del antiguo FRO. Así que ha sido una experiencia lectora muy buena. A pesar de que la novela entra muy a cuchillo, nunca mejor dicho, y que casi me mareo porque tengo muy poco estómago, me ha parecido una novela muy correcta. La prota, Audrey Rose, se sale muy del molde porque a pesar de que es una señorita victoriana de los pies a la cabeza, se dedica a hacer autopsias con su tío. Ya sabéis lo que a mi me gusta una prota peculiar que no mee Chanel number 5. El prota masculino, Thomas, es también singular. Me recuerda mucho a Sherlock Holmes. Aunque entre los dos hay chispas de romance, aquí lo que predomina son los asesinatos de Jack el Destripador, ya que ambos están investigando para descubrir la identidad del misterioso asesino. Otro punto a destacar es la maravillosa documentación de la autora, que hace que disfrutes mucho más de la historia. Seguiré leyendo de esta autora porque ha sido todo un descubrimiento.

-Una sonata de verano de Belén Martínez. Este libro lo vi recomendado en un par de blogs a principios de este años y es el ganador de I Premio Puck. Le tenía ganas, pero no pensé que me gustaría tanto. Es una juvenil muy buena que trata temas como LGTBI, la homofobia, el bullying, el clasismo... con una sensibilidad tremenda. La novela comienza con Casio, un adolescente que viaja en verano a Aguablanca, el pueblo donde está ambientada su novela favorita. Para no alargarme mucho, digamos que ese viaje de verano le cambia la vida. Sé que es muy cliché adolescente, pero lo recomiendo mucho. Es una novela muy delicada y amena de la que podéis disfrutar mucho

-Egomaniac de Vi Keeland. Esta novela la descubrí en el blog Otro romance más y me ha encantado. Es una contemporánea que tiene muchos de los tópicos propios del género, pero conforme pasaban las páginas vi un par de elementos diferentes a novelas de este tipo y que la hace destacar. Pueden ser dos detalles de nada, pero me han sorprendido para bien. Que he leído bastantes novelas de este género y me gustan ya sean siempre sota-caballo-rey, pero cuando ves personajes o situaciones que se salen un poco del molde a mi ya me ganan. 

Para resumir, Emerie, la prota, se acaba de mudar a Nueva York para abrir una consulta de psicología. Cuando ya tiene el despacho, descubre que la han estafado y ese local ya tiene propietario, Drew, un abogado. Drew, se apiada de ella más que nada porque le pone y la deja compartir su oficina con él. Y ahí es cuando se atraen, se enamoran, etc. A priori parece lo normal de este género, pero hay detalles en Drew (que no los voy a decir por spoiler) que me han sorprendido.

-A Fashionable Indulgence de K.J. Charles (no está publicada en español): Este mes sigo con mis históricas LGTBI porque les he cogido gustito. En este casi es la primera de la saga Society of Gentlemen. Me ha parecido un buen comienzo de saga, en el que se descubren los protas de las siguientes novelas y los protas están bien descritos. Y ese es el problema, que es muy primero de saga y como siempre me da la impresión de que se centra más en presentar todo el tinglado que en el romance entre los protas, que va demasiado rápido. Aún así, me ha gustado, pero habría disfrutado más que el romance entre Harry y Julius hubiera sido más pausado y a fuego lento. 

Ha estado bien

-Before the Fall, de Juliet West (no publicada en español): Leí esta novela los pocos días que tuve de playa y es muy correcta. Conforme iba leyendo preveía que todo iba a acabar como el rosario de la aurora. Es una novela muy emo/pesimista y muy dramática, flipé mucho cuando la terminé y en los comentarios de la autora descubrí que estaba basada en una historia real. La novela se centra en Hannah, una mujer que vive y trabaja en Londres durante la Primera Guerra Mundial. Se casó embarazada con un hombre que no quería y que por una apuesta se ha marchado al frente y la ha dejado sin casa y con dos churumbeles a cuesta. Tiene que vivir en casa de su hermana y cuñado, a los que odia, y todo se tuerce cuando se enamora de otro hombre. Como veis no es una novela para leer cuando estás bajo de ánimo. 

-What Happens in London de Julia Quinn (En español publicada como Secretos en Londres). Toda la saga Bevelstoke de Julia Quinn la leí junto a amigas del FRO, por lo que ha sido un placer compartir lectura y opiniones de los 3 libros con ellas. Este es el segundo libro de esa saga y sí, me ha gustado, pero porque la relación entre Olivia y Harry me ha ganado. Sin embargo, hay personajes y detalles que no me han cuadrado. ¿Cómo es posible que Harry entre como perro por su casa en casa de Olivia y que los padres de ella ni se cosquen? Qué estamos a principios del siglo XIX, que no dejaban respirar a las jóvenes para que no las deshonraran... Se ve que los padres de Olivia duermen como troncos para no enterarse. ¿Por qué el problema de alcoholismo del hermano de Harry se soluciona en dos capítulos? Detalles como esos y el final, que ha sido el coño de la Bernarda, le han quitado puntos a este libro. ¿Me ha gustado el libro? Sí, porque los diálogos y relación de ellos es divertida y muy entrañable, pero tiene fallos. 

Emmm, no

-The Secret Diaries of Miss Miranda Cheever, de Julia Quinn (en español publicada como Los diarios secretos de Miranda). Es el primero de la saga que mencioné anteriormente. El prólogo pintaba muy bien, de hecho, me ha parecido uno de los mejores prólogos de la Quinn. Sin embargo, conforme iba pasando las páginas se me iba desinflando todo. Y toda la culpa es de Turner, el prota masculino. Tiene 10 tacos más que la prota y va dándoselas de maduro y dando lecciones a Miranda. Consejos vendo que para mí no tengo... Se comporta como un cobarde e inmaduro. No soy de odiar personajes, pero si en la primera parte de la novela vas dando lecciones de moral y con una actitud paternalista de la hostia y luego en la última parte te comportas como un canalla inmaduro. No. ¿Dónde está la coherencia? Miranda merecía un prota masculino mejor, la verdad. 

Esas han sido todas mis lecturas de julio

¿Cómo fueron las vuestras?

Besos