Reseña:Un escocés en la oscuridad, de Sarah MacLean

La señorita Lillian Hargrove ha vivido casi toda su vida sola, en una jaula dorada, anhelando amor y compañía. Cuando un famoso artista la tienta con hermosas promesas y le ruega que pose para un escandaloso retrato, Lily no vacila…, hasta que ese mentiroso canalla la deja en evidencia. Cuando el cuadro se hace público, a Lily no le queda más remedio que recurrir al único hombre que puede salvarla de la ruina.

El duque de Warnick detesta todo lo que huela a inglés, y a nada más que a la aristocracia. No importa que este imponente escocés haya heredado uno de los más venerables ducados de Gran Bretaña…, no quiere tener nada que ver con él. Sobre todo cuando descubre que el indeseado título viene acompañado de un problema. Un problema demasiado hermoso y floreciente para no ser considerado uno con P mayúscula.

Warnick llega a la ciudad con un solo objetivo: que su pupila se case y se convierta en el problema de otra persona… Luego él podrá regresar a su tranquila y bucólica vida en Escocia.

Es el plan perfecto hasta que Lily declara que solo se casará por amor… y él descubre que hay algo en Inglaterra que le gusta mucho más de lo que debería…

¡Buenos días!

Primera reseña de la rentrée que hacemos. Antes de nada, este libro lo leí en julio (lo que ha llovido desde entonces, nunca mejor dicho) con Sere, Ligaro y Anilla. Abajo pondré un link de sus reseñas, por si queréis más opiniones e información de este libro.

Me lo pasé muy bien leyendo y comentando con ellas (qué risas con cierta escena de cama destructiva). Sobre todo hablando de portadas... Últimamente, en mi opinión, veo dejadez en las editoriales con el género romántico histórico y muchas veces en las portadas aparecen chicas que no se parecen físicamente a las protas del libro y con el vestido de pronovias de turno. En este caso a mi me gustó la portada italiana, porque va con la temática del libro y es preciosa. Seguida de la edición de bolsillo de la editorial Avon (que es la que tengo en casa) en la que dentro aparece una imagen en la que se ve la pareja y un cuadro por detrás (que coincide con la portada). Esos detalles pueden ser una tontería, pero me demuestran que han sido cuidadosos y lo agradezco. Sé que es un tema muy superficial porque también veo que hay mucha dejadez en cuanto a dejar sagas traducidas a medias, no publicar tantas novedades como antes (que en el fondo es un problema más gordo que el de las portadas)...

Al lío, A Scot in the Dark (publicado en español como Un escocés en la oscuridad) es el segundo de la saga Escándalos y canallas (aquí la reseña del primer libro) y en general me ha gustado bastante, aunque un poco menos que el primero. 

Gif absolutamente necesario porque el protagonista es escocés

Lo que destacaría de este libro es a Lily, la protagonista, que está en una situación muy complicada. Un pintor exnovio suyo la pintó desnuda y va a exponer el cuadro. En un principio Lily está asustada y recluida en su casa (lo normal después del susto), pero 4 capítulos más tarde coge las riendas del asunto y le empieza a echar ovarios y a lanzar zascas (que yo he aplaudido). Sí, es una víctima, pero se defiende y no se avergüenza de lo que ha hecho. A mí eso me ha parecido estupendo. Es la antimeadora de Chanel número 5 y lo he agradecido mucho porque ya había tragado litros de ese ilustre perfume una temporada larga...Además, las hermanas Talbot, en especial Sesily (otra ex musa del pintor cansino, que tiene una patada en la boca), la apoyan. Y aquí he de decir que me han sorprendido para bien. Si bien en el anterior libro me cayeron peor que una patada en el ojete, aquí han entretenido y amenizado mucho el libro.

Ahora bien, llegamos al problema, que es Alec, el protagonista masculino ni ser escocés y llevar kilt lo salvan al pobre y guardián de Lily. En el anterior libro se le veía como una persona desenfadada y divertida, pero aquí es un triste de cuidado. Tiene complejo de grandote (la de veces que dice que es un bruto y se lo dicen de manera despectiva es increíble) y un pasado complicado. Se pasa todo el libro más perdido que un pulpo en un garaje: primero esto, pero no, luego mejor lo otro. Te quiero, pero no nos podemos casar. El problema es que tú no sabes que le pasa, qué motivos hay que le impiden casarse con Lily y cuando al final descubres lo que es te ha exasperado tanto su personaje, que sí, a mi me dio penica, pero no llega a redimirse. Si MacLean hubiera revelado antes su pasado y se hubiera entendido por qué tiene ese complejo y actúa así, me habría gustado más. Ya no solo eso, es que el pretendiente de Lily que aparece 3 capítulos contados destaca más que él.

Hubo un capítulo del libro en el que Lily le dio tantos zascas dialécticos a Alec que yo casi me lesbianizo

Otro problema del libro es que tiene los mismos problemas que el anterior... Escena erótico-festiva mitológica (tú eres Selene y yo soy no recuerdo quién) y entonces empieza a correr la trama las 50 últimas páginas cual ferrari con los frenos cortados. Te quiero, no te quiero, no podemos estar juntos, me voy, vuelvo... Yo cuando hace eso MacLean acabo mareada, lo juro.

Metáfora visual de en que estado termino los libros de MacLean

La resolución de todo esto me gustó, pero quizás la vi demasiado anacrónica y adelantada a su tiempo. En general, el libro me ha gustado sobre todo por Lily y los secundarios. En este caso, MacLean se ha basado en el escándalo que sucedió hace un par de años en el que hackearon muchas cuentas de famosas, robaron sus fotos más íntimas y las colgaron por internet. O al menos eso creo yo, que lo he dicho muy pichi. Siempre me gusta y agradezco la originalidad que tiene MacLean al hacer historias.

Dicho esto, a este libro le doy un 8/10 por su protagonista femenina y secundarios y por tratar un tema tan novedoso. 

¿Habéis leído el libro? ¿Os gustó? ¿Opináis que las editoriales tienen dejadez últimamente con este género?

Besos 

Aquí podéis leer la reseña de Serena de Mi biblioteca romántica